"Varios prominentes jugadores de ajedrez padecieron realmente profundos conflictos psiquiátricos durante o al final de sus carreras. El maestro alemán Curt von Bardeleben se suicidó en 1924 arrojándose por una ventana, el mismo método que utiliza Luzhin en el libro de Nabokov. El primer campeón del mundo oficial, Wilhelm Steintz, pasó sus últimos años luchando contra la enfermedad mental. Uno de los jugadores de mayor éxito del primer cuarto del siglo XX, Akiba Rubistein, poco a poco fue víctima de una timidez patológica. Tras realizar un movimiento, se escondía en un rincón de la sala a esperar la réplica de su adversario”.
Gary Kasparov
Como la vida imita al ajedrez
Gary Kasparov
Como la vida imita al ajedrez
2 comentarios:
¡Qué descanso tu blog, chico!
Aquí, a nivel local, también hay caso de ajedecistas que no te están muy cuerdos (aunque lo de la locura ya empieza a parecerme subjetivo, como la belleza)
Yo estoy pendiente de mi hermano, que a veces non che é ben asisado, por si va a más.
Espero de tu hermano, querida Yaya, los más atronadores ataques en el tablero. Ya sabes que el ajedrez es el deporte más violento que existe. Seguro que él está incubando algo bueno. Sea.
Publicar un comentario